Afortunadamente el desenlace de la compra de entradas no tiene mucho misterio y las conseguimos 'rápidamente' y sin dolor.
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| Las entradas |
Fuimos al mismo lugar que dos días antes e hicimos una cola menor, sólo había una persona delante que mientras era atendida se leyó una revista de cotilleos. Imagino que lo de llevar revistas y libros es para amortiguar el aburrimiento de la espera tanto en la cola como mientras se es atendido. Pero lo dicho, que fue muy bien y logramos las entradas.
El papel de la entrada está timbrado y es de altísima calidad, parece que tiene más seguiridad que los billetes de banco para evitar la astucia de los criminosos. Guardaremos una muestra de las entradas como recuerdo.
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| La entrada a la Sala Sao Paulo |
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| Dentro de la sala Sao Paulo |
El concierto estuvo interesante, el edificio también. Efectivamente está en pleno centro de Sao Paulo rodeado de miseria pero dentro todo se olvida.
me he dado cuenta de que me faltaba leer este y que debería intentar continuar yo con el blog! pero no saco tiempo! tengo q ponerme seria!
ResponderEliminarAaaaaah. Eso no es por dejadez, es porque lo tenía escrito pero se me olvidó publicarlo porque quería cumplimentarlo con lo que hicimos el domingo. Entre unas cosas y otras, ya sabes, viajes intercontinentales, lo olvidé y lo puse ayer o antes de ayer y de lo que hicimos aquel domingo, nada.
ResponderEliminarA ver si sacas ratillos para bloggear tu, aunque sea una vez por semana los findes ;)