jueves, 15 de noviembre de 2012

Congonhas y Tiradentes


En el Buen Jesús de Matosinhos
Hoy jueves es festivo en Brasil, es el día de proclamación de la república, y el martes que viene, día 20, también (día de la conciencia negra) aunque solo en Sao Paulo, así que hemos hecho como la mayoría de los paulistas que lo hacen. Nos hemos unido al megapuente festivo y nos hemos venido a conocer más mundo. Esta vez nos acercamos al estado de Minas Gerais, que linda con el estado de Sao Paulo. En MG se dedican bastante a la minería. Desde el avión y desde el coche hemos visto innumerables canteras y empresas de maquinaria para estos menesteres. Pero eso no es el objetivo de este texto así que igual algún dia nos da por contar la historia. En realidad debería contar una sobre el pueblo en el que nos encontramos. Lo haré si me acuerdo otro día, prometido.  
Hemos pillado un vuelo a Belo Horizonte, capital de MG y, por lo que hemos podido ver, la ciudad bonita no parece (desde fuera) y hasta ahí podemos leer.
Con un coche alquilado.... ¡otro Gol! de los de potencia escasa pero con más comodidades que un Seat Panda de serie porque teníamos dirección asistida, elevalunas eléctricos, cierre centralizado y hasta radio MP3. Pero 1000 cc que no dan potencia para escalar las cuestas que hay por aquí.

El objetivo de hoy era llegar a Tiradentes y aprovechando, parar en Congonhas para echar un ojo a la famosa basílica que tiene, la del Buen Jesús de Matonsinhos. Bonita, sin duda, por fuera sobre todo. 
Gracias por sanar mi fractura abierta
Rodeada por 12 profetas muy bien esculpidos por un artista local de hace unos años, Alejaindinho. La iglesia fue construida a imagen de la del Buen Jesús del Monte de Braga, Portugal, para cumplir una promesa que un portugués hizo tras sanar de una enfermedad muy grave. A un lado de la basílica hay unas salas más, una que es una capilla y que no hemos encontrado interesante y la otra una sala donde la gente deja fotos, dibujos y mensajes de agradecimiento y peticiones a Dios. Y claro, aquí uno con tiempo puede pasarse el día ojeando y descubriendo cosas como una foto de una vaca que debió ser muy simpática. La foto de una fractura de una pierna en la que en un texto se reseña lo que aconteció o miles de fotos de carnet o retratos familiares de la época de María Castaña. Echad un vistazo y asombraos.
La basílica da para una cuesta muy escarpada y muy empedrada que está flanqueada por unas torrecillas que son capillas con las puertas cerradas pero con unas aberturas para ver los pasos de Vía Crucis que hay dentro. También son bastante famosos, hechos por el mismo artista de las estatuas de la basílica. Las malas lenguas (o la historia, no lo se) que las caras de los romanos son de gente que el escultor conocía pero que no le caían bien porque le debían dinero o porque sí. Están muy logrados.

¿Carretera o río?
Después de esto, parece ser que Congonhas no tiene mucho más interés turístico nos hemos ido para Tirandetes. Desde Congonhas veíamos que había ciertos nubarrones oscuros en el horizonte que amenazaban lluvia, cosa que hemos comprobado in-situ. Conduciendo nos hemos metido en la tormenta y damos fe de que la carretera se ha convertido en todo un río al que improvisados afluentes vertían litros y litros de agua sin cesar. Muchísimos coches parados en las "cunetas" o haciendo cosas raras en las carreteras. No se si conseguiré subir un video que hemos podido grabar cuando la cosa se ha calmado un poco y las aguas han vuelto a sus cauces. Si hay suerte se verá que transitamos por carreteras anegadas como unos profesionales del motor.
Tienda de artesanía en Tiradentes
Afortunadamente hemos llegado a Tiradentes sin problemas, aunque hemos tardado mucho. Allí hemos llegado a la posada y hemos salido a echar un vistazo antes de cenar. Lo que hemos visto del pueblo nos ha gustado mucho, muy limpio y cuidado. Casitas bajas, carreteras de piedra que destrozan el coche. Mucha 
animación, miles de tiendas de artesanía y muchos restaurantes. Hemos ido a uno y, mientras cenábamos, ha llegado el monzón que ha servido para refrescar un poco el ambiente y vaciar el pueblo de gente. Luego ha parado y la fiesta ha vuelto a continuar.
Mañana más.



Iglesia en Tiradentes
Se puso a llover y solo quedó
 el de las palomitas

Otra iglesia. Las pintan igual.













1 comentario:

  1. Que bonito que es Tiradentes!! y Congonhas, la basílica preciosa, pero el resto, si es el corazón de la acería brasilena, se respiraban los sulfatos!! Hasta el martes por aquí!!

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